Joan Laporta está muy molesto con cuatro jugadores del FC Barcelona que "celebraron" la derrota de Vallecas, que significó el cese de Ronald Koeman, jugando al parchís en el viaje de regreso.
La información la firma el programa Onze de Esport3, y confirma el enfado de Laporta y de su asesor Enric Masip con estos futbolistas.
No han trascendido los nombres, pero los tiros apuntan a Busquets, Piqué, Jordi Alba y Riqui Puig, que son los habituales de este juego en los aviones. Todos ellos comparten afición por este juego con Leo Messi, que no se perdía una partida en los aviones y concentraciones.
El presidente azulgrana entiende que son libres de hacer lo que quieran, pero no parece lógico que después de una derrota con tanta trascendencia se oyeran en el avión gritos y risas generados por la propia dinámica del juego.
Una cosa es no convertir el viaje de vuelta en un funeral, y otra que sea una fiesta. Laporta ha tomado buena nota para comentar con Xavi este tipo de situaciones y ponerles fin.