Vinicius marcó 6 goles en los 49 partidos que disputó la pasada temporada con Zinedine Zidane. Con Carlo Ancelotti lleva jugados 11 partidos y ya ha logrado 7. Un gol más en 38 partidos menos. El trabajo de Ancelotti con el brasileño empieza a dar sus frutos.
El delantero brasileño fue sin duda la gran estrella en el partido de Kiev. Dos goles y una asistencia en la manita que el Real Madrid le endosó al Shakhtar Donetsk. El festival de Vinicius llega en el mejor momento. Después de tres tropiezos consecutivos y a las puertas del clásico del Camp Nou. Había que dar un golpe sobre la mesa y el Real Madrid lo ha dado de la mano de Vinicius.
Se entiende que Vinicius se acercara a la banda para dedicarle sus goles a Vinicius. Sólo él conoce el empeño que ha puesto el técnico italiano en recuperar su mejor versión, la que había perdido con Zidane en el banquillo.
Y reconoció que Ancelotti le motiva en positivo, animándole a marcar goles, y en negativo, amenazándole con el banquillo: "¡Te voy a quitar!", admite Vinicius que le dice el técnico cuando las cosas no salen, para espolearle.
Además, en los números de Vinicius llama la atención que ha conseguido los 7 goles en 17 disparos a portería entre los tres palos. Es decir, que su efectividad llega al 41,17%.
Vinicius ha pasado de ser un problema para Benzema, como admitió en aquella conversación privada con Mendy en el túnel de vestuarios de Dortmund, a convertirse en su mejor pareja de baile. Benzema está a un nivel estratosférico, sublime, y necesita a su lado a alguien que esté a su altura. Y Vinicius lo está.
Goles, asistencias, regates, desborde, velocidad... Vinicius se ha convertido en un tormento para las defensas contrarias. Y, aunque empezó la temporada de suplente, se ha ganado con su esfuerzo convertirse en uno de los fijos en la alineación de Ancelotti: 834 minutos sobre 990 posibles. Ha jugado el 84% de los minutos en los que el Real Madrid ha estado en juego en competición oficial.
Y ahora llega el clásico del Camp Nou. En el último que disputaron Real Madrid y Barcelona, en el Di Stéfano, venció el Madrid y Vinicius marcó dejando en evidencia a Piqué. Este domingo, en el Camp Nou, Vinicius puede fabricar otra jornada trágica para el Barça, otra más.