Mbappé tiene celos de Messi y prefiere ser cabeza de ratón
Mbappé llevaba mal vivir a la sombra de Neymar y soporta aún peor que Messi acapare todos los focos en el PSG.
Kylian Mbappé está a un paso de ganarse la repulsa de la afición francesa por querer desertar del proyecto del PSG cuando se habían sumado a él Leo Messi, Sergio Ramos, Achraf y Donnrumma entre otros. Nadie entiende en Francia que quiera dar un paso atrás en su carrera renunciando a formar parte de un equipo que está llamado a ganarlo todo para enrolarse en otro que viene de un nadaplete y que está muy lejos de reunir en su plantilla el valor que acumula el PSG.
Pero la decisión de Mbappé tiene explicación: los celos. Ha acabado harto de vivir a la sombra de Neymar, quien hasta ahora ha acaparado todos los focos en el Parque de los Príncipes.
Y si no tenía suficiente con Neymar, ahora se ha unido Messi al elenco de estrellas del PSG, lo que inevitablemente le ha arrinconado en el podium de preferidos de los aficionados y prensa galos.
Y Mbappé prefiere ser cabeza de ratón en el Real Madrid que cola de león en el PSG, aunque no sea eso, la cola, lo que le prepara Mauricio Pochettino. Aún asi, tendría que hacer hueco para que Messi marque sus goles y deberá acostumbrarse a que el argentino acapare las portadas cuando no se las quede Neymar.
No es un problema de dinero, porque el PSG le puede pagar lo que pida. Y tampoco de ambición de gloria deportiva, porque el PSG le garantiza los éxitos que nadie más, ni el Real Madrid, le puede asegurar.
Su problema es de celos. Necesita sentirse querido como el mejor. Y eso lo podrá conseguir en el Real Madrid, nunca en el PSG.
Además, sabe que el presidente Florentino Pérez controla la prensa madrileña y que el trato que va a recibir será superlativo, incluso en los malos momentos.
Más que un reto, el Real Madrid es para Mbappé un balneario en el que no deberá compartir estrellato con nadie y podrá perder de vista a Neymar y Messi, los auténticos protagonistas de la temporada en el PSG en el que él interpreta el papel de actor secundario haciendo el coro a las verdaderas estrellas.
