Mourinho le demostró a Bale, en el Tottenham-Chelsea, que no cuenta con él para nada, el Tottenham lo va a devolver y el Real Madrid le busca una salida en el fútbol USA
Gareth Bale se ha convertido definitivamente en un exjugador de fútbol. Mourinho se ha cansado de él, el Tottenham le devolverá al Real Madrid en cuanto pueda y Florentino Pérez le busca una salida en el fútbol USA.
A los 31 años Bale está ya de vuelta de todo. Zidane se hartó de él por su indolencia, por su pasotismo, por su pasión por el golf y desinterés por el fútbol, que es lo que le da de comer, y muy bien. Parecía que volviendo a casa, al Tottenham, el equipo que le lanzó al estrellato, su suerte podría cambiar. Pero tampoco. Mourinho le reclamó en Londres y le recibió con los brazos abiertos, pero él no ha sabido ni querido responder a su interés.
Ya no queda nada de aquel jugador por el que el Real Madrid pagó 101 millones de euros en 2013. En el último Tottenham-Chelsea, Mourinho le tenía en el banquillo y podía echar mano de su concurso para solucionar una derrota que ha dolido a los seguidores del Tottenham. La estrella Harry Kane no jugaba por lesión, pero aún así Mourinho no se atrevió a colocar a Bale como titular. Y tampoco le puso en el campo como remedio ofensivo. Antes prefirió dar entrada a Lucas Moura y Lamela. Bale calentó durante toda la segunda parte, pero no salió a jugar. Toda una humillación.
Y es que Bale, que pensaba que Zidane tenía algo personal contra él, lo está pasando mucho peor en el Tottenham que en el Real Madrid. Mourinho es implacable y no se casa con nadie, ni siquiera con un fichaje sonado que ha pedido él.
Curiosamente, cuando Bale llegó al Tottenham al inicio de la temporada, el equipo de Mourinho comandaba la clasificación de la Premier League. Ahora mismo, con Bale, el Tottenham es noveno, a 14 puntos del líder, el Manchester City de Pep Guardiola. Y sumando seis derrotas y seis empates en 21 jornadas.
En el Tottenham se han cansado de Bale y en el Real Madrid empiezan ya a trabajar en busca de una salida airosa, ya que tiene contrato hasta 2022. Zidane ha insistido en que no quiere volver a tener a Bale en su plantilla. Y a día de hoy no se ve más solución que el fútbol USA, en donde el galés podría mantener su nivel de ingresos y, lo que es más importante, jugar a golf sin que nadie le agobie.