Ansu Fati estará cuatro meses fuera de los terrenos de juego y el fichaje de Mamphis Depay en diciembre se hace absolutamente imprescindible para Koeman.
Ansu Fati estará alejado de los terrenos de juego durante cuatro meses. Aproximadamente, se le espera de vuelta para finales de marzo. Hoy ha sido sometido a una artroscopia y la operación, supervisada por el doctor Cugat, ha sido un éxito.
Finalmente, los médicos han optado por suturar la herida producida en el menisco interno de su rodilla derecha. De esta manera se prolongan las previsiones para su reaparición, pero otra otra parte la intervención no dejará secuelas en su rodilla.
Ansu Fati ha conservado su menisco, algo que de no producirse habría podido dejar secuelas en forma de una regeneración incorrecta del cartílafo.
Existía la posibilidad de aplicar un método más conservador, lo que hubiera agilizado su recuperación dejándola en un mes y medio aproximadamente, pero el riesgo de recaída, que ahora se descarta por completo, hubiera permanecido constante a lo largo de su carrera.
Ansu Fati debe ahora cicatrizar su menisco, un proceso que le llevará aproximadamente tres meses. Después podrá volver a los entrenamientos hasta alcanzar su mejor momento de forma empleando otro mes.
La situación del joven canterano blaugrana carga de razones a Ronald Koeman, que sigue insistiendo en que la llegada de Memphis Depay en el mercado de invierno es más que imprescindible.