Las actividades extra Barça de Gerard Piqué generan mal rollo en el vestuario barcelonista.
Gerard Piqué es un jugador difícil. Muy difícil de controlar. Es un futbolista que genera mal rollo en el vestuario, porque sus compañeros no son tontos y captan que disfruta de trato de favor, y eso genera malestar, y el malestar se traduce en malos resultados. Nada sucede porque sí.
Los compañeros de Piqué están hasta el moño del trato de privilegio que recibe Piqué. Al menos durante la etapa de Bartomeu como presidente del Barça. Cuando no era la Copa Davis, eran sus restaurantes, y cuando no su presidencia del Andorrra.
Lo cierto es que mientras las plantilla del Barça está obligada a sentirse del Barça las 24 horas del día, Piqué busca un momentito para dedicárselo al Barça porque tiene otrtas cuestiones por las que tiene que ocuparse y dedidcarle la mayor parte de su tiempo.
Y esto en el vestuario sienta como un tiro. Además, Piqué está dando motivos sobrados para sospechar de él. El penalti contra el Ferencvaros que le dejó fuera del partido ante la Juventus, el pase a Neto que sirvió para perder dos puntos en Vitoria....
Piqué es reincidente y sus compañeros están hasta el moño de que su falta de concentración sirva para que el Barça pierda puntos en La Liga o en Europa.
Esta mañana, después de dejarse el Barça dos puntos en Vitoria por su culpa, Piqué acudió a Cornellà para ver a su equipo, que no es el Barça sino el Andorra, club del que es presidente. Lo de Piqué es un escándalo. No da la talla como central del Barça pero dedica sus esfuerzos para llevar a lo más alto al Andorra.
¿No hay nadie ahí que le obligue a elegir? ¿Qué prefiere? ¿Ser titular en el Barça o presidente del Andorra? Si tanta prisa le corre ser presidente del Andorra, que se retire, que renuncie a sdr futbolisyta prpofesiuonal y que se dedique en cuerpo y alma a la presidencia del Andorra.
Como si no hubiera pasado nada en Vitoria, en donde el Barça tiró sus últimos opciones para ganar la presente Liga, Piqué se presentó en Cornellà com sus hijos Mila y Sasha y con sus padres, Montse y Joan. El partidfo acabó con empate a dos.