Zidane no acaba de sintonizar con la onda de la estrella brasileña.
Zinedine Zidane decidió hace ya mucho tiempo taparse los oídos de la crítica, tanto la mala como la buena, y seguir su camino siguiendo sus propias convicciones. No le ha ido mal a tenor de los resultados, con sus tres Champions, de ahí que por mucho que haya gente que se empeñe en que debe cambiar su criterio, él permanece inamovible con sus ideas.
Uno de los puntos más críticos de cierto sector del madridismo con Zidane hace referencia a Lucas Vázquez. Hay muchos seguidores que creen que el gallego no da el nivel para estar en la plantilla y lo manifiestan con comentarios, ilustraciones y comportamientos que, en ocasiones, rozan el insulto hacia el canterano del Real Madrid.
Zidane es impermeable a todo lo que se diga en el entorno. Él es de los que piensa que Lucas hace un trabajo oscuro que es tanto o más importante que el que pueden hacer otros que luzcan más. De hecho, si a día de hoy Vázquez está por delante de jóvenes como Vinicius o Rodrygo para actuar en la banda derecha es porque tiene ese ‘plus’ de trabajo que Zidane necesita. El francés ya ha hablado en varias ocasiones con Lucas para agradecerle todo el esfuerzo que hace cada vez que juega y lo hace cuando las cosas han ido bien y, especialmente, cuando no se han dado como todos esperaban.
Zizou tiene claro que porque alguien dibuje una pata de madera encima de las piernas de Lucas, por poner alguno de los ejemplos que a diario se ven en las redes sociales, él no va a dejar de ponerle o, al menos, de darle la oportunidad de jugar ya sea de inicio o en la segunda parte. La decisión puede ser la correcta o no, pero es la suya y así de claro lo ha dejado siempre.
El entrenador del Real Madrid cree que lo primero que necesita es esfuerzo, trabajo y compromiso, después la calidad. “Las tres primeras cualidades tienen mucho de Lucas, por eso juega más de lo que mucha gente desearía”, nos cuenta en primicia una persona muy próxima a Zidane. Le saldrá mejor o peor, pero Zinedine quiere a Lucas en la plantilla y ahí está, jugando minutos y entrando en las rotaciones de su entrenador antes que Vinicius o Rodrygo, dos de los jóvenes a los que Zizou sigue viendo ‘verdes’ para no ser engullidos por esa planta carnívora llamada ‘Real Madrid y su entorno’.