Football Leaks denuncia irregularidades en dos controles antidoping pasados por Sergio Ramos en la final de Cardiff en 2017 y en abril en Málaga.
Una información de Football Leaks ha hecho retumbar los cimientos del fútbol español e internacional. Los medios Mediapart y Der Spiegel han tenido acceso a una información sensible que afecta directamente a Sergio Ramos.
Según esta versión, Sergio Ramos protagonizó una situación irregular en el control antidoping de la final de la Champions League disputada en Cardiff en 2017. Entonces la UEFA archivó el caso atendiendo a las explicaciones del propio jugador y de los médicos del club blanco.
Pero la información vuelve a implicar al capitán madridista en un asunto relacionado con el dopaje. En este caso por violar el protocolo antidopaje tras el partido de LaLiga que el Real Madrid jugó en Málaga el pasado mes de abril.
Mediapart y Der Spiegel afirman, en base a la documentación de Football Leaks, que tras la final de Cardiff el laboratorio de control antidopaje de Seibersdorf, en Austria, recibió una muestra de orina de 110 mililitros de un jugador del Real Madrid con el código 3324822. La muestra contenía trazas de dexametasona, un preparado de cortisona que tiene un efecto anti-inflamatorio, sustancia que está incluida en la lista de prohibidas de la WADA (Agencia Mundial Antidopaje).
La UEFA comunicó al jugador el hecho y éste respondió el 10 de julio informando que el médico del Real Madrid le había tratado el día antes del partido contra la Juventus añadiendo un informe médico firmado por los servicios del club.
Der Spiegel recuerda las reglas que la AMA para el uso de la dexametasona. Su administración está permitida antes de los partidos sólo si el médico del equipo informa de dicha administración durante la prueba de dopaje. Si el médico no lo hace y si se encuentran trazas de dexametasona, se considera un caso sospechoso de dopaje, de ahí que se pusiera en marcha la investigación del caso.
Por lo visto, en el formulario adjunto a la muestra, no se mencionó la dexametadosona, aunque sí se informó de una inyección intraarticular el día anterior a la final, pero de otro medicamento: Celestone Chronodose. Según la información, Ramos habría recibido 1.2 mililitros de la sustancia en su hombro y otra inyección de la misma dosis en su rodilla. Al igual que la dexametasona, Celestone Chronodose es un glucocorticoide y también tiene un efecto antiinflamatorio. Y está igualmente en la lista de sustancias prohibidas de la AMA.
Ramos acudió al control antidopaje acompañado por el llamado Dr. A. Semanas después, tras descubrirse la dexametasona, el Dr. A envió un informe asumiendo el error a la hora de informar del tratamiento y su error al comunicar las sustancias inyectadas (Celestone Chronodose) en el hombro y la rodilla debido a la "euforia del momento tras ganar el título". Fue un "error humano", escribió el Dr. A., "y, por lo tanto, comprensible".
La UEFA le creyó y cerró el caso. Der Spiegel señala que la UEFA le escribió en una carta: "En el futuro, le pedimos a usted y al médico de su equipo que sean sumamente cautelosos al completar el formulario de control de dopaje y, más precisamente, la declaración de la medicación".
El informe de Der Spiegel añade un nuevo caso en el que se relaciona a Sergio Ramos con el dopaje. Fue el 15 de abril de este año, tras el partido contra el Málaga. Según los documentos de Football Leaks el jefe de la Unidad de Control de Dopaje de la Agencia Antidopaje española mandó un informe de dos páginas al jefe médico del Madrid seis días después en el que informó de lo sucedido.
El documento refiere que Ramos le habría preguntado si se podía duchar antes de dar la muestra de orina, alegando que el equipo quería volar a Madrid lo antes posible. Pero se lo prohibieron. Según las normas de la agencia no es posible ducharse o ir al servicio antes de un test de orina. Ramos, según ese informe, expresó su "disgusto", así como el médico del Real Madrid, pero pese a la intransigencia del oficial antidopaje, que prohibió al jugador ducharse antes de la prueba, Ramos se duchó, "a pesar de mi advertencia", escribió el oficial.
Después de recibir la carta de la agencia antidopaje española a finales de septiembre de 2018, informa Football Leaks, Ramos y el Madrid tenía 10 días para alegar. Tanto el capitán como el Madrid se negaron a contestar a las preguntas de la red de Colaboraciones de Investigación Europea (EIC). Aún asi, la agencia española de lucha contra el dopaje dijo en una declaración que "en el presente caso, el resultado de los procedimientos de investigación no estableció ningún hecho que permita concluir que hubo un acto que constituye una violación antidopaje".