La llegada de Abidal al Barça ha supuesto la salida de Robert Fernández, que siempre ha estado en el punto de mira
Robert Fernández ha dejado el FC Barcelona después de tres años en el club, donde ha habido algunos errores en las incorporaciones que le han costado el puesto. Su figura siempre ha sido muy cuestionada en el Barça, ya que no ha estado a la altura de las exigencias del club debido a los fichajes que ha realizado.
Desde el 2015, cuando llegó al cargo, Robert ha cerrado 12 operaciones en forma de fichajes para el club, entre los que destacan algunos aciertos y varios desaciertos.
En su primera temporada, hace dos veranos, llevó a cabo algunos de los errores más sonados, como el fichaje de André Gomes, Digne, o Alcácer, jugadores que no han demostrado estar a la altura del equipo y que están con medio pie fuera del mismo.
Además, se gastó mucho dinero en estos fichajes, ya que pagó al Valencia un total de 65 millones por el portugués y por el delantero (André costó 35 y Alcácer 30), mientras que por Digne se gastó 16,5 millones de euros.
El verano pasado, su gestión estuvo más o menos acorde a la anterior, ya que también fichó a algunos futbolistas que no han terminado contando para Valverde. Deulofeu, por 12 millones, Semedo por 30,5 millones y Yerry Mina por 11,8.
Caso aparte es el de Dembélé (105 millones), que pese a no haber cumplido con las expectativas, se espera que pueda dar el salto definitivo esta temporada.
En total, y sin contar a Dembélé, Robert se ha gastado en errores 128,8 millones de euros.
Por otro lado, es cierto que suyo es el mérito de haber traído jugadores que sí han demostrado tener el nivel para jugar en este equipo.
Durante su primer verano contrató a Umtiti por 25 millones, aunque también repescó a Denis Suárez por 3,5 y la llegada del portero holandés Cillessen (13 millones), que pese a tener el rol de suplente, ha demostrado ser un futbolista válido para el Barça.
En cuanto al verano pasado, uno de los mayores aciertos y por el que fue muy discutido, fue el fichaje de Paulinho por 40 millones. El brasileño demostró muy rápido que había sido un acierto y dejó en evidencia a todos aquellos que dudaban de él.
Por último en enero, se cerró el fichaje de Coutinho por 120 millones de euros, que aunque salió muy caro, seguro que seguirá amortizándolo como hasta ahora.
Por tanto, y sin contar a Coutinho, Robert se ha gastado un total de 81,5 millones de euros en buenos fichajes.