El hijo de Johan Cruyff ha finalizado su etapa en el Maccabi Tel-Aviv y ahora busca un nuevo destino
Jordi Cruyff, hijo del mito holandés, ha descartado, por ahora, ir al Barça a ejercer como director deportivo. Su nombre se ha estado barajando en las últimas semanas, ya que se sabía que iba a finalizar su contrato con el equipo israelí.
Pero el protagonista ha desmentido esos rumores y ha descartado cualquier incorporación al club blaugrana que preside Bartomeu. El propio Jordi ha comentado que “hoy por hoy, la posibilidad de ir al Barça está totalmente descartada. Tampoco es el momento. No me veo en el actual esquema de la dirección deportiva, creo que no encajaría ahora mismo”.
Asimismo, ha comentado que durante el verano pasado estuvo cerca, pero deshecho la oferta por querer cumplir su contrato con el Maccabi: “Hubo contactos el pasado año para incorporarme, pero en ese momento ya tenía la decisión tomada de entrenar al Maccabi. Estoy muy agradecido de que pensaran en mí, pero desde entonces no ha habido nada más, salvo las relaciones puntuales por el legado de mi padre. El tema de incorporarme al club ahora está descartado y estoy valorando otras opciones personales y profesionales”.
Pese a haberle dado calabazas al club, Jordi ha querido expresar lo que se le ofreció durante el verano pasado, cuando también dijo que no: “Hablamos de incorporarme al organigrama del club. No concretamos una posición. En las primeras reuniones ya les dije que tenía la idea de entrenar. Quería probarme en un sitio donde ya conocía el tema y la Liga. Quedó claro y desde entonces seguimos manteniendo contacto por otros temas. El Barcelona siempre se ha portado muy bien en todos los temas relacionados con mi padre, como el nuevo Mini Estadi con su nombre. Y a partir de aquí nada más, felicitarles por el doblete que no es nada fácil”.
Finalmente, Jordi Cruyff habló de lo que ha conseguido el Barça este año, y de la posibilidad de que un triunfo del Madrid ante el Liverpool pueda minimizar los éxitos cosechados por el equipo de Valverde. Ante esto, ha asegurado que “no tiene nada que ver. La Liga es la competición de tu regularidad en 38 partidos. Si la ganas es que has tenido la máxima regularidad y esto tiene un valor extraordinario. Valverde ha significado un plus muy importante. Ha manejado muy bien el vestuario, ha entendido la situación y nunca se ha quejado de lo que le ha podido faltar. Ha trabajado con lo que tenía y ha sacado un rendimiento tremendo. Y los jugadores que llevan más años han dado un porcentaje extra de sí mismos con la marcha de Neymar”.