El jugador del Barcelona parece que no tiene buen ojo para los negocios y lo compensará con su renovación

Cada vez son más los futbolistas que quieren ampliar sus vías de ingresos más allá del terreno de juego. Uno de los que más polémicas ha dejado fuera del verde ha sido Leo Messi, quien ha sido protagonista de una de las condenas más ejemplarizantes por haber evadido impuestos. Sin embargo, parece que el argentino sigue con sus negocios fuera del fútbol y eso que no le están yendo nada bien. Sin ir más lejos, Messi acumuló, el año pasado, unas pérdidas de 2 millones de euros en su negocio inmobiliario.

Los negocios ruinosos de Leo Messi en Barcelona

Leo Messi, propietario de diferentes sociedades de dudoso valor, es quien gestiona Explotaciones Rosotel. Esta compañía es la que se encarga de todos sus negocios inmobiliarios, entre los que destaca la compra de un hotel en Sitges hace unas semansa por 30 millones de euros. Además de esta compra, también se encarga del alquiler de oficinas en uno de los edificios más emblemáticos de Barcelona: el edificio Rostower, en la calle Urgell. Sin embargo, en el último año, Messi ha visto como Rosotel se ha convertido en un pozo de perder dinero con casi dos millones de pérdidas en el último año. 

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Por si eso fuera poco, ahora su mujer Antonella también se ha decidido embarcar en más negocios. Junto a la mujer de Luis Suárez, han decidido lanzar su tienda de ropa en Barcelona, algo que puede dejar más gastos a Messi. En el club azulgrana temen que el delantero argentino quiera sufragar todas estas pérdidas con una renovación millonaria que paguen los socios del Barcelona.

 

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