El jugador de la Juventus ha tenido una pataleta con la afición blanca antes de la final de Cardiff.

Sami Khedira no tuvo una salida muy feliz del Real Madrid. En su última temporada como merengue apenas contó con minutos, y los refuerzos que llegaron mostraron un rendimiento muy superior al del alemán sobre el terreno de juego. Eso propició que se marchara en junio de 2015 por la puerta pequeña, y sin apenas reconocimiento de una afición que no terminó de cogerle cariño. Parece que esta salida le dolió mucho al germano, que no ha dudado en atizar al madridismo en un arrebato de frustración a pocas horas de jugar la final de la Champions, esta vez con la camiseta de la Juventus.

En una entrevista al medio alemán 'Kicker', Khedira ha 'rajado' contra la afición blanca por el trato que recibió durante su etapa merengue: "En Madrid fui adorado por mis entrenadores y me trataron de una manera justa, pero no tuve ese mismo reconocimiento por parte del público", se ha quejado. No podía esperar mucho más, pues su rendimiento no fue lo suficientemente bueno como para destacar respecto a los demás compañeros.

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"La gente se preguntaba si era lo suficientemente bueno"

En la misma línea ha criticado una injusticia a la hora de valorar su regularidad: "Cuando jugaba diez partidos seguidos a buen nivel, la gente daba por sentado que tenía que hacerlo. Pero si el undécimo no era tan bueno, me criticaban de inmediato y se preguntaban si era lo suficientemente bueno para el club", ha añadido un Khedira ofuscado tras no triunfar en el club más importante del mundo. Toda una muestra de rencor, lejos de lo que podría haber sido un mensaje de agradecimiento al Real Madrid por dejarle formar parte de un equipo con el que logró la Champions en 2014.