Visto el encuentro que ayer la Roja jugó en Italia, se puede decir que parece que el Real Madrid ha trasladado su maldición con los empates al combinado nacional. Pese a dominar a los locales durante más de una hora, otra jugada tonta condenó a los de Lopetegui. En este caso, fue un penalti que Sergio Ramos cometió en el tramo final de partido, donde el capitán trabó a Éder y permitió a De Rossi empatar desde los once metros. No es el primer desliz que tiene Ramos esta temporada. Si bien es cierto que su arranque de curso no es para tirar cohetes, desde luego ha servido para que sus críticos le pinchen más que nunca. Sin embargo, el central de Camas no ha dudado en defenderse y mandar un mensaje a sus detractores: "A los que rajan les digo que disfruten ahora, porque al final acabarán callados. Los errores nos pueden pasar a todos, como al mismo Buffon, que es un emblema. La diferencia es que en Italia le aplauden y aquí te pitan, pero como diría el abuelo Luis Aragonés, yo tengo el culo pelado. Ni me vengo arriba con los halagos, ni me van a destruir con las críticas", ha advertido el central.

"A lo mejor me tienen tomada la matrícula"

Ramos también ha hablado de su penalti, del que ha dicho que "lo he visto ahora mientras estaba pasando el control antidóping. Para mí es un penalti riguroso, de esos que se pitan uno cada 40. A lo mejor me tienen tomada la matrícula. No voy a culpar al árbitro. Quitando la jugada del penalti hemos hecho un buen partido, incluida la posesión, pero el fútbol es eso, pequeñas acciones", ha dejado claro el capitán, que pese a todo lo sucedido dice estar contento por haber recuperado "la identidad de juego".