En realidad lo fue porque el FC Barcelona, el mejor club de la historia, se ha clasificado por quinta vez consecutiva para las semifinales de la Champions League, algo inédito en esta competición desde que adquirió este nombre. Pero lo histórico de ello no es la cantidad, ni hacerlo de forma consecutiva, sino porque lo hizo con nueve canteranos en el once titular.
Valdés, Piqué, Puyol; Busquets, Xavi Iniesta; Messi, Cesc y Cuenca fueron los hombres que entraron de inicio y a los que hay que añadir a Thiago, que entró en el minuto 62 para acabar de apuntalar al mejor equipo de Europa. El objetivo del Barça es llegar a jugar algún día una final de Champions con un once creado íntegramente en la Masi ay cada vez está más cerca de conseguirlo. Montoya, Fontàs, Muniesa o Tello están esperando para entrar en un conjunto que está llamado a entrar en la historia y escribir una de las más grandes del fútbol.
Por su parte, esta noche el Real Madrid jugará un partido de trámite ante el APOEL en el que se supone que José Mourinho debería dar oportunidades a los chavales del filial, a los hombres de la casa. Sin embargo no lo hará. Seguirá en su línea de obviar a la cantera y meter a sus amiguetes portugueses en el terreno de juego. Y que siga así por muchos años.