En ellos se enfrentará a Gabón en lo que será un duelo a vida o muerte. Todo ello después de haber superado una fase de grupos muy complicada. Los de Keita han llegado a este partido obligados a ganar, después del empate de Guinea Conakry, que dejaba todo en manos de Mali.
Más complicada se ha puesto la situación cuando Mali ha recibido el primer tanto en el segundo tiempo. Por suerte, al siguiente mintuo los compañeros del azulgrana han sacado lo mejor de sí mismos y han logrado poner el empate en el marcador que les metía en la Copa de nuevo. Y a 15 minutos del final ha llegado el éxtasis cuando Keita ha rcogido un balón muerto y ha marcado el segundo que les daba la clasificación.
Buena noticia para el jugador y para su país pero mala para el barcelonismo, que deberá esperar un poco más su vuelta en el momento en el que el equipo más lo necesita.