Zidane puede precipitar la salida de un jugador en el mercado invernal con su alineación para el Clásico. De su decisión depende que Isco Alarcón deje el Real Madrid. Y es que no ser titular ante el Barça sería la señal definitiva para el malagueño. No salir de inicio, con las bajas que acumula el equipo blanco sería un duro palo para el centrocampista. Un Isco que no para de ponerle trabas a su renovación, ya que si no le dan minutos los tendrá que buscar en otra parte. Con la vuelta de Casemiro, la preocupación se ha instalado en el entorno del futbolista. Porque si Zidane apuesta por el brasileño pese a la inactividad tras su lesión, las puertas al once se le cierran un poco más. Modric es intocable y únicamente quedaría un puesto libre, a disputarse entre James, Asensio o el principal favorito, Kovacic. La evolución del croata le dejará en el banquillo, tal y como apuntan diversos medios de Madrid. A pesar de haber dado un salto evidente en su fútbol, confirmar el cariño de la grada y ganarse el de la opinión del club, Zinedine Zidane podría prescindir de Isco, un jugador que al principio le parecía exquisito pero al que le ha ido dando de lado por su poca implicación en el césped.
Si el sábado a las 15:15 no ve su nombre en la alineación, Isco no se lo perdonará a Zidane, ni al Real Madrid. Aceptaría cualquiera de las múltiples ofertas que le han llegado de clubes europeos, que anhelan con hacerse con sus servicios. La Juventus o el Manchester United de Mourinho son los mejor colocados. Dos grandes equipos donde volver a recuperar la sonrisa y volver a sentirse importante.
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