Guardiola es sinónimo de victoria en La Romareda
Esa primera derrota le llegó en la temporada 1993-94, con el Barça metido en una lucha sin fin con el Deportivo de La Coruña, que acabaría perdiendo aquel campeonato en el último minuto ante precisamente el Valencia, el equipo que mañana debe dar una alegría a los barcelonistas.
Aquella primera derrota dolió, pero ofreció un espectáculo de fútbol y goles sin igual (6-3). Tampoco lograría la victoria en la temporada siguiente en plena decadencia del equipo de Johan Cruyff. El Barça perdió 2-1 en la jornada 5 y ya se veían rastros de lo que acabaría siendo el final de una época.
Cuatro temporadas después Guardiola volvería a caer en la Romareda, esta vez con Louis Van Gaal en el banquillo y en la jornada 38, es decir, con la Liga ya ganada cuatro jornadas antes. Dos temporadas después, en la última de Guardiola como jugador del Barça, los azulgranas volvieron a sucumbir, esta vez por 3-1.
No son malos registros como jugador, y mucho mejores son como entrenador. Y es que desde el banquillo, Guardiola no ha perdido ningún encuentro ante el Zaragoza y hoy no puede ser la primera vez. Los maños irán a por todo, les va el descenso. El Barça también, le va la Liga.
