Solari, que sólo jugó un año con el Atlético y que sufrió las miserias del descenso de categoría con los rojiblancos, llegó sin hacer demasiado ruido y tuvo que ganarse el cariño y el respeto de buena parte de la afición madridista, que no lo tenía nada claro con su fichaje. Sin embargo, cuajó cinco excelentes temporadas en el Madrid y fue uno de los artífices más importantes de la consecución de la novena Copa de Europa en 2002.
Antes del argentino, muchos otros cambiaron de chaqueta. Paco Llorente, sobrino de Gento, Ramón Moreno Grosso o auténticos mitos del madridismo como Hugo Sánchez, Juanito o Raúl fueron antes colchoneros que madridistas. Mención especial merece la del eterno '7' que hasta hace nada deleitaba a la grada del Bernabéu con sus goles. Jesús Gil se arrepintió en reiteradas ocasiones en su momento de haberse desprendido de una de las joyas de la cantera atlética, que hoy en día es el máximo goleador histórico de la entidad blanca y que firmó una de las noches más inolvidables del madridismo un 18 de enero de 1997, precisamente ante su ex equipo, con el famoso gol en el Calderón en aquel 1-4 en el que sentó a media defensa rival.
Algunos muy queridos por la grada del Calderón, como Hugo Sánchez u otros por mal comportamiento del club, como Juanito, decidieron cambiar de aires y no se equivocaron; El último que pudo haber hecho el viaje fue el 'Kun' Agüero, que estuvo cerca de fichar por el Madrid el pasado curso. Un obstinado Miguel Ángel Gil lo impidió y el argentino acabó en el Manchester City, según algunas voces en contra de lo que eran sus auténticos deseos.
El primer jugador que pasó del Atlético al Real Madrid fue Eduardo Ordóñez, en 1932. Falcao podría pasar a ser el más reciente el próximo verano. Algo que a buen seguro no gustará nada a la afición colchonera, pero así es la vida. Y no pueden decir en la Rivera del Manzanares que no estén acostumbrados a situaciones similares.