Cristiano Ronaldo borró cualquier atisbo de duda frente a la Ponferradina. Corría el minuto 73 del encuentro cuando el portugués volvió a ver puerta y señalaba el camino de la victoria para el Real Madrid. Con un gesto serio, el jugador madridista se abrazaba con todos sus compañeros que le transmitían así su apoyo en un momento crucial para el resurgir de la estrella blanca.

El madridismo no duda de Cristiano Ronaldo, todo lo contrario. El partido del Barcelona ya está olvidado, como apuntaron los jugadores del Real Madrid tras el encuentro frente a la Ponferradina, y es que en el camino ahora se perfila otro rival duro de batir, el Sevilla. El gol ante la Ponferradina sirvió para dar moral a Cristiano, pero este sabe que su verdadera recuperación tiene que verse en un encuentro difícil como el que se plantea el próximo sábado en la capital hispalense, de donde guarda bonitos recuerdos el luso, ya que la campaña pasada le metió cuatro goles a los andaluces.

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Todo el equipo está con el portugués, hasta los directivos han mostrado su apoyo al crack portugués, como confirmo Pardeza al término del encuentro: “Nadie puede durar de su entrega y compromiso, es un jugador inmenso”. Ahora toca hacer borrón y cuenta nueva y demostrar al madridismo que su hambre de gol está más impoluta que nunca.