Ha sido tajante en su cuenta de twitter: "Basura de un periodismo barato y que sólo le gusta meter mierda, ya lo dije en una rueda de prensa y lo digo ahora amapolas para todos ellos". Y añade: "Los únicos recuerdos que tengo de esa foto es lo bien que me lo pasaba con mis amigos, los recuerdos de verdad los viví con mi Madrid". Y concluye: "Cuando uno no tiene pasta para comprar camisetas y desea jugar con sus amigos cualquier camiseta vale".
Gutiérrez Hernández ha perdido una oportunidad maravillosa de estarse calladito. Montando un numerito de una bobada y sentando cátedra sobre lo que es periodismo basura y lo que no, sólo confirma la amplitud de su capacidad intelectual. Y puede quedarse tranquilo el personaje, nadie va a creer por esa foto que sus colores son los blaugrana. En el Barça se "fabrican" jugadores de otro estilo, con otros valores, con otra calidad futbolística y otra actitud ante la vida. Evidentemente Gutiérrez Hernández no puede pasar por uno de ellos y esa imagen suya, con la camiseta del Barcelona, puede herir la sensibilidad de muchísimos aficionados que no aceptan en el Barcelona a futbolistas como él, que pudieron llegar a mucho y se quedaron en muy poco por su mala cabeza. Porque lo que ahora se lleva en el Barça son triunfadores formados en casa y que lo ganan todo, con su equipo y con su selección.
Quédese tranquilo, Gutiérrez Hernández. Dice el refrán que "aunque la mona se vista de seda, mona se queda", y nadie va a confundirse a estas alturas con usted. Así que no se ponga nervioso, no hace falta repartir amapolas por verse de jovencito, menos rubito y vestido de blaugrana.