Y desde allí, desde donde viene este hedor, es de donde llegan siempre las críticas al madridismo. Las últimas, disparadas con balas de plomo hacia José Mourinho. El motivo es la foto que le tomaron el 25 de enero en el parking del Camp Nou, mientras supuestamente estaba esperando al árbitro del partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey. Dicen algunas lenguas que el portugués empezó a increpar al colegiado, aunque en realidad lo que se tiene es una simple foto del míster apoyado en un coche.
Curiosamente, las lenguas que hablan no recuerdan que estas supuestas pantomimas las inventó Pep Guardiola. Supuestas porque no se sabe si es cierto lo que ocurrió en el aparcamiento del estadio azulgrana pero sí lo es lo que ocurrió en el campo del Málaga el pasado 27 de febrero de 2010. Tal y como recuerda el portal "Defensa Central", el míster catalán se coló en el vestuario del trío arbitral y presionó al colegiado para tener un arbitraje más favorable en el segundo tiempo: "Mis futbolistas no hablan mal de vosotros, os tienen respeto, y merecen otro trato. Ahora, si quieres, lo pones en el acta", le espetó el catalán.
En aquella ocasión fueron muchos más medios los que reflejaron el hecho en sus páginas, dando credibilidad al asunto. En esta ocasión es sólo un medio y catalán es que se ha hecho eco de esta información.