En el partido de ayer frente al Málaga, Pep Guardiola dio minutos a Thiago y a Adriano, con el fin de que estos pudieran mantenerse frescos y no perder el ritmo de competición y con un segundo objetivo, el de dar descanso a jugadores de vital importancia para el encuentro de vuelta de los cuartos de la Copa del Rey frente al Real Madrid.
De este modo, el técnico azulgrana ‘sacrificó’ ayer los servicios de Xavi, Puyol y Cesc en detrimento de los del hijo de Mazinho y de los del brasileño. Con todo, ambos hicieron un gran trabajo y ayudaron a resolver un difícil escollo que se presumía La Rosaleda, especialmente tras la inversión veraniega en fichajes del EuroMálaga.
Con todo, Pinto, dos Santos, Cuenca y Pedro acompañaron a los tres canteranos azulgrana en el banquillo. En total, cuatro campeones del mundo fueron reservados ayer por el de Santpedor para que el miércoles estén de lo más frescos ante el eterno rival. Aun así, a punto estuvo de requerir Guardiola a Xavi, a quién mandó calentar en la segunda mitad. Sin embargo, Pedro, Cuenca y Dos Santos fueron los encargados de sustituir a Alexis, Adriano e Iniesta.
Con todo, el entrenador catalán no tuvo que lamentar su decisión, pues la jugada le acabó saliendo redonda, ya que se llevó los tres puntos de un campo muy difícil sin tener que recurrir a la calidad y determinación de Xavi y Cesc ni al espíritu combativo de Puyol, que estarán listos para el asalto de pasado mañana frente al conjunto de Mourinho.