Con la reciente lesión de Pinto, el recién incorporado Valdés y las molestias de Oier, Rubén Miño se postula como la primera opción, y casi única, de Guardiola para el puesto de portero titular en la final de la Supercopa de España. De hecho, Pep incluso ha llamado a Jordi Masip, que se entrenaba con el Barça Atlètic, por si acaso.