PREVIA. Real Madrid-Espanyol: ¡Da comienzo la Operación Reconquista!

Asensio y Lucas Vázquez, dos ex del Espanyol, formarán la tripleta atacante del Real Madrid junto a Cristiano Ronaldo.

Real Madrid y RCD Espanyol cerrarán la jornada séptima de LaLiga en el Bernabéu. El Real Madrid viene de humillar al Borussia Dortmund, líder de la Bundesliga, a domicilio por 1-3. El Espanyol ha vencido en su último partido de LaLiga al Deportivo en Cornellà por 4-1. Los dos equipos llegan al choque en buen momento, aunque las apuestas le son muy favorables al Real Madrid. Primero porque después de tres partidos no conoce la victoria en el Bertnabéu (dos empates y una derrota) y ya toca reaccionar, segundo por la superioridad de la plantilla blanca sobre la blanquiazul y tercero porque la historia de este duelo tiene color claramente blanco.

El Espanyol es el rival favorito del Real Madrid

Real Madrid y Espanyol se han enfrentado en 83 partidos de Liga en el feudo blanco, y en las últimas cuatro temporadas el Real Madrid ha ganado sin dificultad a su rival. El último resultado positivo del Espanyol en el Bernabéu, un empate, se remonta a la temporada 2012-13, cuando se registró una igualada a dos goles. De hecho, las estadísticas reflejan que el Espanyol, un clásico de la competición nacional, es el rival ante el que el Real Madrid ha sumado más victorias a lo largo de la historia de la Liga. 4 victorias y 14 empates es el saldo del Espanyol en el feudo blanco a lo largo de la historia liguera.

En el total de enfrentamientos de ambos equipos en todas las competiciones, el Real Madrid ha ganado 98 de los 165 partidos disputados, ha empatado 33 y ha perdido 34 partidos. Los jugadores blancos hyan anotado a lo largo de la historia 367 goles frente al Espanyol y ha encajado 189 tantos.

Máxima presión para el Real Madrid y para Cristiano

El equipo de Zidane llega a este partido después de disipar dudas de manera contundente ante el Borussia Dortmund (1-3), con un Cristiano Ronaldo memorable muy bien secundado por Gareth Bale. Pero sigue teniendo en casa su gran asignatura pendiente. Sólo se ha impuesto al Apoel de Nicosia (3-0) y en competición europea, pero antes empató a dos ante el Valencia, a uno frente al Levante, y cayó derrotado frente al Betis en el último duelo disputado en casa que le ha llevado a una situación límite a siete puntos del líder, lo que indica que el cuadro blanco, todavía en el mes de septiembre, ya no depende de sí mismo para ser campeón y lo que confirma que los hombres de Zidane ya no pueden tener más errores si pretenden recortar la distancia que le separa del FC Barcelona. La presión es máxima. También para Cristiano Ronaldo, que ha reservado sus goles para Europa y necesita inaugurar ante los periquitos su cuenta goleadora, todavía a cero en LaLiga.

Los planes de Zidane con Gareth Bale

La reconquista del terreno perdido en LaLiga empieza para el Real Madrid ante el Espanyol a la espera de lo que haga el Barça frente al Las Palmas en el Camp Nou. Zidane sigue contando con las bajas de Marcelo, Theo, Benzema y Koviacic, a la que se suma el galés Gareth Bale, que salió tocado de Dortmund afectado por unos calambres. Aunque Zidane ha preferido mantener la incertidumbre de la alineación del galés hasta el último momento, lo cierto es que no ha podido preparar el partido en los entrenamientos durante la semana y no arriesgará con él, especialmente porque dispone de un banquillo de oro que puede suplir su ausencia sin que se eche en falta su calidad.

"Lo vamos a ver mañana. Es una sobrecarga, no es importante, pero como siempre no nos gusta arriesgar. Cuando un jugador tiene una cosa pequeña no queremos arriesgar. Ya veremos si está mañana con nosotros. Lo de la selección, no creo que haya un problema entre el Madrid y Gales. Depende de él, de su estado de forma. Lo veremos día a día", ha avanzado Zidane sobre la posibilidad, cada vez más remota, de que Bale pueda estar disponible ante el Espanyol.

Todo apunta a que serán dos exespañolistas, Lucas Vázquez y Asensio, los que acompañarán a Cristiano Ronaldo en la vanguardia blanca frente al Espanyol, mientras que fuentes próximas al vestuario madridista confirman que la intención de Zidane es dar descanso a Isco, con lo que el centro del campo sería el clásico (Modric, Casemiro y Kroos) y la defensa, la titular con la ausencia de Marcelo (Carvajal, Ramos, Varane y Nacho), y Keylor Navas en la puerta.

La nota positiva en el Real Madrid es la recuperación total de Jesús Vallejo una vez superada su lesión muscular.

El Espanyol, de menos a más

El RCD Espanyol ha ido creciendo a medida que ha avanzado la competición. Empezó en las posiciones de cola y tras el 5-0 sufrido en el Camp Nou se ha rehecho, aunque todavía no sabe lo que es ganar fuera de Cornellà. Mientras el Real Madrid es sexto, con 11 puntos, el Espanyol es el decimotercero con 8 puntos. Los blancos han marcado 11 goles, por 7 los blanquiazules. Los de Zidane han encajado 6 goles y los de Quique Sánchez Flores 9. A favor del Espanyol, los dos valiosos empates que consiguió en sus desplazamientos al Sánchez Pizjuán y en el Estadio de La Cerámica, un detalle que no debe pasar desapercibido para los jugadores de Zidane, que ya están mentalizados de que el equipo catalán no dará más facilidades que las que ofrecieron Valencia, Levante y Betis hasta ahora en el Bernabéu.

Después de ganar a Celta y Deportivo, y de empatar en Villarreal, Quique Sánchez Flores llega al Bernabéu para enfrentarse al Real Madrid, en el que ya militó como futbolista, con la intención de dar la campanada. No podrá disponer de Javi López y Duarte, lesionados. Tampoco podrá alinear a Víctor Sánchez ni a Piatti pero sí recupera a Álvaro Vázquez, Javi Fuego y Sergio Sánchez. Quique puede echar mano de toda su artillería madridista: Diego López, Granero, Jurado y Mario Hermoso.