La "tara" de Valverde que no gusta en el Barça

Fede Peris Caído en desgracia Juan Carlos Unzué por el rifirrafe sostenido con Neymar, que le ha pasado factura, el nombre de Ernesto Valverde vuelve a sonar con fuerza como candidato a sustituir en el FC Barcelona a Luis Enrique. Valverde tiene muchas virtudes que le convierten en idóneo para la directiva del FC Barcelona, pero tiene también una "tara" importante que le aleja del Camp Nou. Valverde es un "hijo de Johan Cruyff", enfrentado en vida a la actual directiva. 

Llegó al FC Barcelona como jugador, procedente del Espanyol junto a Miquel Soler, en la temporada 1988-89 y fue protagonista directo del inicio de la era Johan Cruyff como entrenador del Barça. Valverde no llegó a triunfar en el Camp Nou, apenas un par de temporadas contemplan su paso por el club, pero quedó impregnado de la huella cruyffista, hasta el punto de sintonizar con los totems del cruyffismo como Pep Guardiola, con quien mantiene una relación de admiración mutua.

 

Valverde: ¿el "enemigo" en casa?

Valverde cuenta con el visto bueno de Pep Guardiola, enfrentado con la actual directiva y muy próximo a Joan Laporta, enemigo encarnizado del presidente azulgrana. Bartomeu une a ambos. Contratar a Valverde sería tanto como meter en casa a un técnico amigo de los enemigos del presidente, y eso es, por encima de cuestiones técnicas, lo que impide a Bartomeu dar su brazo a torcer para convertir a Valverde en entrenador del Barça.

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