Luis Enrique aborta la salida de uno de sus cracks

Sergio Portales El Sevilla se ha propuesto dar esta temporada el paso al frente que le sitúe a la altura de los grandes en la lucha por los títulos y no ha regateado en gastos a la hora de reforzar su plantilla con nombres rutilantes. El último objetivo de Monchi ha sido ni más ni menos, uno de los jugadores más valorados por Luis Enrique: Rafinha Alcántara. El club andaluz se ha puesto en contacto con el jugador para conocer su predisposición a un cambio de aires. El club sevillano aceptaría tanto una cesión como un traspaso definitivo. Rafinha no se cerró en banda, pero antes quiso conocer la opinión de su valedor en el FC Barcelona, Luis Enrique, el hombre que se lo llevó al Celta y lo devolvió al Barça, en donde ha tenido protagonismo pero sin gozar nunca de los privilegios que acompañan a los titulares indiscutibles. Rafinha quiso saber de boca del propio Luis Enrique el protagonismo que le tiene reservado para la temporada recién iniciada.

Rafinha estaba dispuesto a aceptar el desafío del Sevilla

Rafinha es consciente de las dificultades que tendrá esta temporada para disfrutar de minutos en el FC Barcelona con una centro del campo superpoblado que se ha visto reforzado con las nuevas incorporaciones de Denis Suárez y André Gomes, que se unen a la lista de Busquets, Rakitic, Iniesta y Arda Turan que ya estaban en la plantilla.  Sin embargo, Luis Enrique se ha cerrado en banda, no quiere saber nada de la marcha de Rafinha, un jugador que goza de sus preferencias y a quien ya dio minutos en San Mamés recién incorporado a la plantilla tras los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Rafinha ha aceptado la decisión del técnico azulgrana, aunque la opción sevillista gozaba de sus simpatías. Tras su cesión al Celta hace tres temporadas, no le habría importado convertirse en un futbolista importante del nuevo Sevilla que está construyendo Jorge Sampaoli.     

---