Luis Enrique se ha mostrado eufórico en la sala de prensa por la forma con que sus jugadores han resuelto en la segunda parte un partido que se presentaba muy complicado y que llegó al descanso con empate a uno. ¿Qué pasó en el vestuario cuando los jugadores se retiraron del terreno de juego? ¿Qué pasó para que la segunda parte acabara con un contundente 5-0 para el Barcelona? Algo tan sencillo como que hubo una bronca monumental del técnico, que les recordó a sus jugadores que estaban avisados, que el Celta les iba a complicar la vida y que sólo podía ganarse el partido corriendo más que el rival. Luis Enrique se mostró muy enérgico y se preocupó de transmitir a sus jugadores su enfado.
La filigrana y el patadón
Dicho y hecho. El equipo barcelonista salió en la segunda parte a comerse al Celta y se lo comió. Sobre el lanzamiento atípico del penalti por parte de Messi Luis Enrique ha dicho: “Es una manera legal de tirar el penalti, a algunos les gustará más y a otros menos, pero los que estamos en este club intentamos ganar títulos y hacerlo pasándolo bien y haciendo disfrutar a nuestros aficionados de una manera espectacular”. Y luego, ligando el penalti con otros temas, como la magia que aporta Neymar al juego del Barça, ha querido añadir: “ya sabemos de qué va el tema, en este país está más aceptado un patadón que una filigrana, pero es un debate que no nos interesa. Sabemos que seguirá sucediendo y sabemos de dónde viene”. A Luis Enrique ni le gusta que hablen de falta de respeto cuando se trata de calificar una acción "diferente" de alguno de sus cracks: “Precisamente nuestra forma de respetar al adversario es seguir mejorando y hacerlo a través del fútbol. Estos jugadores entrenando son todavía mejores y más difíciles, hacen cosas que dices ¿cómo lo han hecho...?”.
Sobre el partido ha dicho que “contra el
Celta no hay ni partido fácil ni un acción tranquila. Hemos hecho una muy buena primera parte, quizás no demasiado precisos, con relativa ventaja, nos ha costado un poco definir pero hemos creado numerosas ocasiones de superioridad. Aunque pueda parecer un partido fácil, para nada, ha sido muy complicado y estamos muy contentos con esta victoria que nos refuerza y nos mantiene líderes. El Celta es un equipo muy complicado y muy difícil, no ha renunciado a atacar en el
Camp Nou cuando la mayoría de equipos vienen a encerrarse, es un equipo muy difícil de batir”.